La casa está ubicada en un entorno natural y tranquilo, cerca de playas y zonas de ruta preciosas. Todas las habitaciones cuentan con baño y cama grande. Los espacios son amplios y cómodos. El trato de los propietarios es excelente, cuidan los detalles como nadie.

Me sentí especial, no tengo ninguna queja en absoluto.

La casa es perfecta, con una distribución ideal y una decoración encantadora. Cada habitación tiene un baño incorporado y camas muy cómodas. La cocina está completamente equipada y no nos faltó de nada. El salón es muy acogedor y tiene un amplio sofá. Además, la terraza acristalada ofrece unas vistas maravillosas. Los propietarios son muy amables y atentos. 10/10.

Me sentí mejor que en casa, no tengo ninguna razón para quejarme.

La ubicación de este alojamiento es perfecta. Está cerca del centro de la ciudad, pero lo suficientemente retirado para disfrutar de la tranquilidad. Además, cuenta con hermosas vistas al mar y está rodeado de un entorno natural impresionante.

Para ser sincero, no hay nada que no me haya gustado.

Pasamos 6 noches en A Casa de Elisa Hostal con 6 adultos y 1 bebé. Fue una experiencia increíble. La ubicación es excepcional, cerca de hermosas playas y zonas de ruta. Las habitaciones son amplias y cómodas, cada una con baño propio y camas grandes. La casa está decorada con buen gusto y cuenta con espacios funcionales. El trato de los propietarios es excelente, cuidando cada detalle. Nos sentimos como en casa y sin duda volveremos.

Mejor imposible! 😊

La decoración de la casa es encantadora, con detalles cuidados y de buen gusto. Los espacios comunes están muy bien distribuidos y son accesibles para personas mayores. Me sentí cómoda y segura en todas las áreas del hotel.

Me hubiera gustado tener más actividades pensadas específicamente para personas mayores.

Nos encantó la ubicación de esta casa de campo. Está rodeada de un hermoso paisaje natural y ofrece vistas espectaculares al mar. Además, está cerca de varias playas y zonas de senderismo. Las habitaciones son espaciosas y cómodas, con baños privados y camas grandes. También nos encantó el trato amable y atento de los propietarios, que cuidaron cada detalle para hacernos sentir como en casa.

El desayuno no estaba incluido en nuestra estancia.

¡Increíble! La ubicación, decoración, vistas al mar y ambiente son simplemente de otro nivel. La casa está recién rehabilitada y decorada con muy buen gusto. Cada habitación tiene un baño incorporado, camas cómodas y armarios amplios. La cocina está equipada con todo lo necesario. El salón es muy cómodo y la terraza acristalada ofrece unas vistas maravillosas. Los propietarios son amables y atentos. ¡Volveremos sin duda!

¡Increíble experiencia! La ubicación, la decoración y el ambiente fueron mind-blowing. La casa es perfecta, con amplias habitaciones y baños incorporados. La cocina está muy bien equipada y la terraza acristalada con vistas al mar es jaw-dropping. Los propietarios son amables y atentos. ¡Para repetir!

He pasado una estancia maravillosa en A Casa de Elisa, en Laxe. Fuimos seis adultos y un bebé y todo fue increíble desde el principio. La ubicación es perfecta, en un entorno natural tranquilo y con vistas espectaculares al mar. La casa ha sido recientemente renovada y está decorada con muy buen gusto, cuidando cada detalle para crear un ambiente cómodo y acogedor. Las habitaciones son amplias, con baño propio, camas cómodas y armarios espaciosos. La cocina está totalmente equipada y el salón es muy cómodo. Además, la terraza acristalada y la barbacoa exterior son un plus. Los propietarios son muy amables y atentos, realmente nos sentimos como en casa. Sin duda, repetiremos en nuestro próximo viaje a la Costa da Morte.

Recomiendo este hotel, es total.

Está rodeado de un entorno natural tranquilo y cerca de hermosas playas y rutas. Además, está cerca del pueblo pero lo suficientemente retirado para disfrutar de tranquilidad.

Para nosotros fue ideal.

Me encantó la decoración de la casa, con detalles que reflejaban la tranquilidad y el encanto del entorno. Los espacios comunes eran amplios y cómodos, perfectos para relajarse. Además, la accesibilidad para personas mayores era excelente, con pasillos amplios y facilidades para moverse sin dificultad.

Me gustaría que hubiera más actividades específicas para personas mayores, como clases de yoga o excursiones adaptadas. Los niños que trabajan allí son encantadores, pero creo que podrían ofrecer opciones más adecuadas para adultos mayores.

la casa está recién rehabilitada y decorada con muy buen gusto, cuidando cada detalle para hacer la estancia cómoda. El entorno es tranquilo, con bonitas vistas al mar y cerca del pueblo. Cada habitación tiene baño propio, camas cómodas y amplios armarios. La cocina está bien equipada y el salón es muy cómodo. Los propietarios son amables y atentos.

No poder quedarme más días.

El entorno natural tranquilo y cercano a playas y rutas, habitaciones con baño y cama grande, amplios espacios cómodos, excelentes propietarios atentos a los detalles. Perfeito.

Mi estancia en A Casa de Elisa fue realmente maravillosa. Me encantó la ubicación, ya que estaba cerca del pueblo pero aún así se sentía retirado y tranquilo. La casa era simplemente perfecta. Estaba muy limpia y bien decorada, y tenía todo lo que necesitaba para sentirme cómodo. Cada habitación tenía su propio baño, lo cual fue genial, y las camas eran muy cómodas. La cocina estaba bien equipada y pude cocinar sin problemas. El salón era espacioso y el sofá era muy cómodo para relajarme después de un día de exploración. Pero lo mejor de todo fue la terraza acristalada con unas vistas increíbles. También había una barbacoa fuera, aunque no tuve la oportunidad de usarla. Los propietarios fueron muy amables y siempre estuvieron pendientes de que tuviera todo lo que necesitaba. Sin duda, recomendaría este lugar a cualquiera que esté buscando una experiencia relajante en la Costa da Morte.

Me encantó la decoración de la casa, especialmente los detalles artísticos y los muebles antiguos que le daban un ambiente acogedor y elegante. Además, las áreas comunes eran espaciosas y cómodas, perfectamente adaptadas para personas mayores como yo. Me sentí segura y relajada en todo momento.

Lo único que hubiera pedido para unas vacaciones aún mejores para las personas mayores es que el personal estuviera más disponible para ayudar con las maletas y ofrecer asistencia adicional. Aunque los niños que trabajan allí fueron amables, a veces sentí que necesitaba un poco más de ayuda, especialmente llevando mis maletas hasta mi habitación.